“BUSCÁBAMOS A DIOS POR MEDIACIÓN DEL PAPA FRANCISCO”
Desde que empezamos el segundo semestre de este año se nos invitó a las estudiantes de los grados Noveno, Décimo y Once del Colegio El Carmen Teresiano de Bogotá, que voluntariamente quisiéramos formar parte del grupo de jóvenes de Bogotá que recibiría al Papa Francisco en su visita a Colombia a inscribirnos para dicho evento. El colegio tuvo sesenta cupos, asignados por CONACED (Confederación de Colegios Católicos), pero la verdad es que más estudiantes querían integrar esta Delegación. Coincidimos en este grupo estudiantes de la pastoral Juvenil del Colegio y otras que sin estar en nada explícito de pastoral, nos sentimos llamadas a participar de esta experiencia, Dios viene para todos y así lo sentimos nosotras.

La Hna. Angela María Zuluaga Ospina, coordinadora de Pastoral del colegio, junto con las Hermanas Yasmín Patricia Contreras Rivera, Emily Adriana Larrota Niño y otros seis docentes del colegio, nos acompañaron tanto en las tres jornadas de preparación que vivimos, en las cuales se preparó una coreografía para presentarle al Papa Francisco en la Plaza de Bolívar, como el día 7 de Septiembre, cuando por fin pudimos verlo y escucharlo.

Ese día fue hermoso y a la vez sacrificado, pero valió la pena. Llegamos al colegio a las 5 de la mañana para el desplazamiento a un punto de encuentro que se nos indicó, y de ahí a la Plaza de Bolívar. Fuimos parte de los 22.000 o más jóvenes que estuvimos allí para recibir al Papa, verlo y escuchar sus palabras. Mientras pasaban las horas hasta las 11:15 de la mañana, cuando salió al balcón del Palacio Cardenalicio, la inquietud y ansiedad iban creciendo en nuestros corazones: se presentaron para nosotros artistas reconocidos en el país y coros religiosos, haciendo más amable la espera, pero lo que queríamos era verlo a él. Una vez salió a ese balcón, se nos olvidó el cansancio por tantas horas de pie y la emoción se hizo visible en expresiones espontáneas que, quien las decía, las demás las coreábamos: “Esta es la juventud del Papa”, “Francisco, amigo, Colombia está contigo”… y algunas otras. ¿Quién hace que 22.000 jóvenes queden en silencio absoluto para escuchar? Eso sólo puede hacerlo Dios, a quien íbamos a buscar esa mañana por mediación del Papa. Toda esta experiencia nos remontó a lo que hemos aprendido de los tiempos bíblicos, cuando las muchedumbres se agolpaban para escuchar a Jesús, queríamos ver y escuchar al Papa Francisco, sabiendo bien que venía de parte de Dios para estar con nosotros. Sus palabras, muy interrumpidas por nuestros aplausos y reacciones a medida que él iba hablando, su lenguaje tan sencillo y directo nos hizo sentir con un amigo más… ¡y qué amigo!

Frases como:

“Dios los ama con amor de Padre y los anima a seguir buscando y deseando la paz, aquella paz que es auténtica y duradera”.

“Mantengan viva la alegría, es signo del corazón joven, del corazón que ha encontrado al Señor. No se la dejen robar, cuiden esa alegría que todo lo unifica en el saberse amados por el Señor”.

“Ustedes, los jóvenes, tienen una sensibilidad especial para reconocer el sufrimiento de otros”.

“También vuestra juventud los hace capaces de algo muy difícil en la vida: perdonar”.

“¡Cómo no van a poder cambiar esta sociedad y lo que ustedes se propongan! ¡No le teman al futuro! ¡Atrévanse a soñar a lo grande! A ese sueño grande yo hoy los invito”

Resonaron en nuestros corazones… es imposible describir en palabras algo tan difícil de expresar como es la experiencia interior de cada una, pero es claro que esta experiencia marcó nuestras vidas.

Agradecemos la posibilidad que tuvimos de vivir algo así, tan diferente e importante para nuestras vidas.

Laura Valentina Maldonado y Danna Erira Estudiantes de 11° B del Colegio El Carmen Teresiano de Bogotá