Llena de fe mi confianza en los continuos apuros, acudía a una estratagema muy simple: decía la hermana que la inocencia inclinaba la protección del señor. Cuando en la casa faltaba pan, aceite, utensilios etc., las reunía con las pequeñas y se ponían a rezar a la santísima virgen y a San José hasta que obtenía la gracia, este es un ejemplo de fe y confianza en el señor que nos regalan nuestras hermanas TERESA TODA Y TERESA GUASCH.